Prensa Portuguesa / Yubetzy Perozo.- En un esfuerzo por llevar el avance científico y tecnológico a cada rincón de Portuguesa, facilitadores de Infocentro emprendieron un viaje de aproximadamente 30 a 40 minutos desde Acarigua hasta la remota parroquia de Río Acarigua, en el municipio Araure. Los facilitadores Iris López y Carlos Suárez se unieron a la facilitadora local Anyerli Morillo con un objetivo claro: impartir formación en robótica educativa. Esta iniciativa refleja el compromiso de Infocentro con la difusión del conocimiento y las herramientas del futuro, asegurando que comunidades más alejadas también tengan acceso a oportunidades de aprendizaje innovadoras y transformadoras.
El despliegue de este equipo de facilitadores en la Escuela Básica «Lisandro Alvarado» no fue una actividad rutinaria, sino una experiencia educativa que trascendió las expectativas. Infocentro se distingue por ofrecer charlas formativas que van más allá de la teoría convencional, introduciendo a los estudiantes en un mundo de innovación y tecnología de manera práctica y tangible. Esta metodología permite a los niños y niñas interactuar directamente con los conceptos, transformando la abstracción en una realidad palpable que despierta su curiosidad y fomenta un aprendizaje significativo en un área tan crucial como la robótica.
Setenta y tres estudiantes de tercer y quinto grado fueron los afortunados receptores de esta jornada, donde los kits de robótica se convirtieron en la herramienta principal para acercarles a la tecnología. Los facilitadores demostraron y permitieron a los niños manipular estos dispositivos, convirtiendo las lecciones en una experiencia dinámica e interactiva. De esta manera, los conceptos tecnológicos dejaron de ser meras teorías para convertirse en prácticas emocionantes que superaron con creces las expectativas de los jóvenes participantes, quienes se sumergieron con entusiasmo en el mundo de los robots y la programación básica.
La jornada en la escuela «Lisandro Alvarado» se transformó en un día inolvidable para los estudiantes. Lo que podría haber sido una jornada escolar común se convirtió en una aventura innovadora e interesante, desde actividades colaborativas que fomentaron el trabajo en equipo hasta la emoción de manejar un robot por primera vez. Los niños y niñas de la parroquia de Río Acarigua estuvieron completamente absortos, prestando atención al más mínimo detalle de lo que los facilitadores les enseñaban. Este evento no solo les proporcionó nuevos conocimientos, sino que también sembró en ellos la semilla del interés por la ciencia y la tecnología, abriendo un abanico de posibilidades futuras.
